Hace un par de días, llamó mi atención un artículo que hacía mención de una reunión sobre prosperidad y seguridad en Centro América que se llevaría a cabo dentro de las instalaciones del Comando Sur en Miami, Florida, del 14 al 16 de Junio, y en la que participarían todos los países del Triángulo Norte convocados ésta vez por México, como socio del Pentágono. (Ver enlace del artículo abajo).
Previamente, el 26 de abril, el Jefe del Estado Mayor de la Defensa de Guatemala, Juan Manuel Pérez, habría anunciado abiertamente, el establecimiento de “acuerdos entre los representantes de los países de la región y los Comandos Norte y Sur de los Estados Unidos de realizar patrullajes aéreos, terrestres y de reconocimiento en la frontera con México, intercambiar información e inteligencia, y estandarizar protocolos y procedimientos para realizar operaciones de interdicción con el apoyo de tecnología e inteligencia del Comando Sur”.
Incluso, celebró el proceso de intercambio de información que logró identificar una ruta de inmigrantes indocumentados al norte del Petén y la instalación de una base militar en el mismo departamento. Así mismo, destacó que los encuentros con los militares estadounidenses eran “estratégicos y claves para afinar los mecanismos, rutas de migrantes, contrabando de ganado, la utilización de personas para el paso de la droga.”
Por otro lado, los medios de comunicación hablaban de dicha reunión en un tono diferente. Se anunciaba la celebración de un foro para la prosperidad en donde, de parte del empresariado guatemalteco, se propondría el fortalecimiento de la infraestructura para el mejoramiento de la inversión. (Ver enlace del artículo de prensa abajo).
Bonitas palabras para esconder no solo el plan dirigido en contra de los migrantes por medio de la militarización de la región, sino también, una maniobra que busca el apoderamiento de territorios ricos en recursos naturales por parte de los Estados Unidos y sus aliados, las élites económicas de los países.
Dicho trasfondo pasó desapercibido para algunos.
Sin embargo, la pronta implementación de éstos planes ha quedado evidenciada por el acontecimiento de tres hechos puntuales:
1. En los últimos días salió la noticia que el 2 de Junio fueron desplazadas forzosamente por un contigente militar y de la PNC, unas 700 personas de la comunidad de Laguna Larga de El Petén, habiendo finalmente arribado a Campeche, México. Actualmente se encuentran en dicho lugar viviendo en situaciones tan precarias que la Misión Internacional de Observación de Derechos Humanos (MODH) frontera México/Guatemala lanzó el día 5 de Junio, un comunicado de emergencia humanitaria y de refugio, por la falta de vivienda digna y la concurrencia de enfermedades gastrointestinales y cutáneas (resultado de haber caminado varios kilómetros de selva), para las cuales no se contaban con las medicinas necesarias, ni la alimentación debida.
Las imágenes de nuestros conciudadanos desplazados son contundentes y solo confirman lo afirmado en dicho comunicado. (Ver enlace abajo).
2. Desde ese día todo ha pasado muy rápido. Hace dos días, en el diario “El Periódico” aparece en primera plana una foto en donde figuran el embajador Todd Robinson y algunos “distinguidos empresarios nacionales” entre ellos, el señor Felipe Bosch Gutiérrez y Salvador Paiz de FUNDESA. Su objetivo (según la noticia), contribuir con el desarrollo en las comunidades por medio de la instalación de infraestructura, aduciendo que los beneficios son superiores a los costos que el plan conlleva y que esto beneficiará también el proyecto de ciudades intermedias, el cual se ha visto frenado por una mala red vial, según sus palabras.
Las ciudades intermedias, de acuerdo a la CEPAL y a grosso modo, son ciudades que pretenden aminorar el número de habitantes que se concentran en las grandes ciudades, procurando territorios de inclusión, seguros y sostenibles.
Pero, si los pobladores están siendo desplazados, ¿a quién beneficia este proyecto realmente?
Recordemos de manera breve quién es el señor Bosch Gutiérrez, quien aparte de haber asistido a la reunión en Miami como representante de FUNDESA, también es parte de la Corporación Multi Inversiones, a quienes, junto con otros grandes empresarios, les debemos que nuestra ciudad capital se haya convertido en un contenedor de bloques de cemento, de agobiantes centros comerciales, en donde se vive feliz consumiendo hasta lo que no se tiene, a tarjetazo y pagos diferidos. En lugar de procurarle a la niñez y juventud una vida más enriquecedora, sana y al aire libre.
Haciendo un repaso y de conformidad con la información proporcionada en su propio sitio de internet, Multi Inversiones ha desarrollado 14 centros comerciales en toda Guatemala y 11 proyectos residenciales, lo que se traduce en un millón de metros cuadrados de construcción. Tremendo negocio el del cemento y la infraestructura, ¿no lo creen?
Observando con detenimiento la foto de El Periódico, también resalta la presencia del señor Juan Pablo Carrasco, Presidente de AMCHAM Guatemala y abogado ligado a la firma Díaz Durán & Asociados, la misma que representa al consorcio Mossack Fonseca en el país. Mossack Fonseca es la firma de abogados panameños involucrada directamente en el caso de los “Panama Papers” y quienes a través de la constitución de compañías denominadas “offshore” ocultaban propiedades y activos a gobernantes, políticos y otras figuras públicas para evadir grandes cantidades de impuestos. Escándalo que tuvo un impacto a nivel mundial.
¿Coincidencia? Juzgue usted.
3. Por último y completando la troika de hechos, la noticia hace un par de días sobre una base militar que se instalará temporalmente en Retalhuleu. Acción que se justifica, según el Ministro de la Defensa, en un marco de cooperación. Por su parte, la embajada de Estados Unidos también lo confirmó aduciendo que la llegada de los “Marines” se debía a una invitación hecha por el Gobierno de Jimmy Morales, indicando que “vienen a capacitar en temas de desastres y apoyar al cuerpo de ingenieros del Ejército”.
Si fuera ésta la razón genuina, se esperaría que una vez finalizada la tarea, la presencia militar también cesara. Sin embargo, podría ser que a propósito del lamentable desastre natural de hace tres días, aprovechen para dar inicio a la intensificación militar que se visualiza por medio de la instalación de la base militar, que aunque no en Petén (como se habría planeado), ya ha dado mucho de qué hablar.
Por ahora, solo son especulaciones. Habrá que estar muy atentos al desenlace de esta situación que en lo personal, me llena de desesperanza al mismo tiempo que me provoca una pregunta:
¿Qué podemos hacer por Guatemala si sigue siendo el patio trasero de los Estados Unidos y el parque de diversiones de nuestras flamantes élites que posan sonrientes mientras sus acciones son aplaudidas?
Enlaces:
https://movimientomigrantemesoamericano.org/2017/06/11/plan-pentagono-un-plan-para-contener-la-migracion-y-militarizar-los-pueblos/
https://www.facebook.com/pg/la72tenosique/photos/?tab=album&album_id=1386691548089473
https://elperiodico.com.gt/inversion/2017/06/15/proponen-fortalecer-la-infraestructura/